CAPÍTULO PRIMERO DESDE EL FLUIR O CON EL FLUIR DEL AGUA Venimos del agua, somos la mayor parte agua y la mayor parte de la tierra es agua. No podemos estar mucho tiempo sin beber agua, o algo que contenga agua. EL AGUA ayuda constantemente a la vida, la apoya en cada paso de una forma totalmente generosa, sin esperar nada a cambio. Desde hace algo más de diez años busco entender un poco más el agua, y en ese buscar he encontrado el maravilloso trabajo que ha realizado THEODOR SCHVENK en su libro el “ CAOS SENSIBLE “, en concreto la parte que lleva el titulo : “ SOBRE LA ESENCIA ESPIRITUAL DEL AGUA”. Quizás uno de los más bellos trabajos sobre el AGUA. PRANALUX Al comenzar a trabajar en los grupos de radiestesia, la técnica que aprendí para poder pasar las energías de unos determinados campos vibratorios al agua, y así poder utilizar este agua en la armonización de geopatias y otras energías sutiles, lleva el nombre de “pranalux” y consiste en algo tan fácil como: a) Llenar una vasija de agua y ponerla en la mesa de trabajo. b) Colocar alrededor de la vasija de agua los campos vibratorios seleccionados por radiestesia. c) Colocar sobre la vasija un cristal catalizador. d) Aunar con la voluntad la intencionalidad de que todos los campos vibratorios van a trasladar sus energías al agua, y que estas energías serán recibidas por el agua con la intención de poder armonizar el espacio para el cual han sido elegidas. e) Testar los días de tratamiento que requiere la armonización. f) Testar cada día para comprobar que la vibración baja hasta convertir, lo que en un principio fue un espacio alterado por geopatias y otras energías sutiles, en un espacio sano y saludable con una vibración optima para vivir en él. Como ya he indicado, al mismo tiempo que se realiza esta parte del trabajo, se está apoyando al tratamiento de armonización con nuestra intencionalidad. Es bastante común que las técnicas simples suenen a poco efectivas, mas no es así en el caso del Pranalux. Después de haberlo utilizado en varios centenares de casos resueltos, y de haber sido testigo de sus utilizaciones por otras personas (tanto a nivel individual como en trabajos de grupo), he podido comprobar sus resultados positivos. A veces nuestra cuadricula de mente necesita técnicas engorrosas y pesadas, pero no por eso son más eficaces. La mente pretende, en el cuadro de apoyos para las dudas que ella misma crea, poder justificar algo que nunca sería necesario justificar si tuviésemos fe en nuestras actuaciones y en nosotros mismos. En estos campos de trabajo, la duda debe ser desterrada sin piedad, no debe ocupar un instante en nuestro hacer, pues lo convertiría en un deshacer, o en un hacer nada efectivo. Al aplicar el pranalux de una forma correcta, con absoluta convicción en los resultados de una armonización en todos los sentidos positiva, en muchas ocasiones se registraban fenómenos positivos que no se habían buscado. No ha sido nunca campo de mi curiosidad investigar por qué se producía esto, siempre daba las gracias, y les consideraba bienvenidos. Personalmente entiendo que, en la forma de armonizar un espacio, en la mayoría de los casos va también implícita la apertura a que esto se produzca, tanto si es con bienestares de todo tipo para las personas, como si es con los objetos que consideramos “ inertes”, en la tierra, etc.… Cuando decido armonizar un espacio, no sólo tengo en cuenta el espacio, si no a las personas que viven en ese espacio, y la petición que formulo arropando la técnica suele ser en estos términos. Yo soy cocreando la armonización de este espacio dentro de una Petición Justa, Y que aquí sea. Gracias, gracias, gracias. El respeto como parte inherente de la ética personal, se conjuga con lo jocoso de algunas anécdotas: Una de ellas ocurrió en una casa en la que se habían instalado por doquier recipientes con agua bendita a la que respeto como auténtico campo vibratorio, dependiendo su intensidad del que la bendiga. (La ultima vez que asistí a una ceremonia de culto católico, cosa no habitual en mí, pude percibir sensaciones agradables; parecía que el sacerdote que oficiaba era realmente un mago, un alquimista, alguien que ya hubiese realizado trabajos de magia blanca en otras épocas). Pues bien, como iba contando la intención era lícita, en concreto trataban de que un “ser desencarnado que campaba por allí a sus anchas” abandonase ese lugar. Más no se tuvo en cuenta que la diplomacia es algo que también sienta cátedra en lo intangible, y lo que es más, si va acompañada del respeto su eficacia es de un valor inestimable. Resultó de este proceder que el ser desencarnado se ocultaba cuando estaba la casa prácticamente “fumigada” a nivel energético con el agua bendita, mas volvía, y en un tono un tanto cabreado, cuando ese agua ya no hacía “sus efectos”. Pasó aquella situación, de ser un asunto de obligado desalojo, a un explicar desde la comprensión a ese ser que en aquel lugar estaba perdido, drenando la energía de los seres encarnados que allí vivían, y acto seguido se le pidió “que si quería iniciar el camino hacia la luz le ayudaríamos a iniciarle”. La vibración de la casa pasó pausadamente a convertirse en un lugar saludable, y lo que es más, las obras de mejora que se llevaron a cabo pudieron llegar a buen puerto sin obstáculos inexplicables como anteriormente acontecía. En un principio, el pranalux no sólo se utilizaba para armonizar las casas, locales, espacios…, también se utilizaba para ayudar en los problemas o desarmonías de las personas, pero su utilización era siempre externa. Mi intuición era que ese agua se podía tratar según requiriese cada situación personal y que por supuesto también se podía ingerir, (y al cabo de poco tiempo, se creó un campo vibratorio para tratar el agua que normalmente se bebía en casa.) Personalmente he ayudado a personas a distancia energetizando un agua que en ese instante ellos tenían delante, y luego se iban bebiendo, cuando querían, teniendo en cuenta que antes de que estuviese agotada el agua, debían rellenar la vasija nuevamente. Otras de las aplicaciones en que se puede aplicar el pranalux es pulverizando ese agua tratada, bien por toda la casa, bien por determinados espacios de esa casa, en algunas situaciones una vez al día, y en otras de varias veces al día. Con respecto a las personas, también se puede aplicar pulverizando a una cierta distancia, determinada con el sistema radiestésico, en estos casos estaríamos trabajando con los cuerpos energéticos, como por ejemplo el cuerpo etéreo. SOBRE LA ESENCIA ESPIRITUAL DEL AGUA. “Realmente resulta vana la tarea de intentar expresar la esencia de una cosa. Percibimos los efectos; una relación completa de esos efectos abarcará sin duda alguna lo esencial de la cosa. En vano trataremos de describir el carácter de una persona; reuniendo en cambio sus gestos y sus acciones aparecerá ante nosotros una imagen de su carácter”. GOETHE, “Tratado de los colores”. Consideremos ahora el agua desde ese punto de vista. Allá donde el agua aparezca, la vida podrá manifestarse en la materia, y allá donde falte esto no será posible. El agua es por lo tanto, el elemento secreto de la vida. Allá donde puede, arrebata a los seres y las cosas de la muerte. Ella es la gran sanadora de todo aquello que por haber perdido el equilibrio se vuelve enfermo. El agua tiende siempre al equilibrio, pero a un equilibrio viviente y no uno rígido en el que la vida forzosamente se apagaría. Por doquier hace de mediadora entre los contrarios, los cuales acentúan su disparidad cuando ella falta. Reúne aquello que estaba separado o en oposición haciendo brotar de esta lucha algo nuevo. Disuelve toda forma demasiado fija para entregarla a la vida. En si misma es químicamente neutra, pero se une a otras sustancias para impedir que lo sólido perjudique demasiado a la vida. El agua no desea nada para si misma. Ella se abandona a todo, nunca pregunta cual va a ser la forma que va a adoptar, ya sea la de una planta, la de un animal o la del hombre. Con la misma abnegación desempeña la función que sea necesaria. Ella “renuncia” siempre, y cuando su servicio se ha acabado en un lugar, se retira y se dispone para una nueva creación o mediación en otro lado. Debido a que es esencialmente pura ella puede purificarlo, refrescarlo, sanarlo, tonificarlo y vivificarlo todo... El agua es el elemento de la abnegación... del perpetuo ser para los demás. El agua no tiene otro ser que el “ser para otros “... Su determinación es la de no estar todavía determinada y a ello se debe el que antiguamente fuese llamada la madre de todo lo determinado (HEGEL.”Filosofía de la naturaleza” 2ª parte). El agua no se cierra a la luz tal como sucede con los sólidos; ella quiere ser limpia y transparente. En el juego de colores del arco iris ella alcanza el culmen de sus posibilidades. De forma absolutamente desinteresada trasmite al ojo las impresiones del mundo visible y al oído aquellas del mundo sonoro. Pero se abre también a las armonías y ordenes de los cielos y las comunica al germen del ser humano, al embrión, al cual ella envuelve por completo. Comunica igualmente estas armonías y ordenes al espíritu pensante del hombre por medio de una esfera de agua que envuelve su cerebro. Liberada en gran medida de la pesantez se encuentra a mitad de camino entre la tierra y el cosmos, no se pierde jamás en el uno o en el otro y a pesar de todo permanece estrechamente ligada a ambos, enlazándolos en un circuito eterno. Ella se encuentra a sí misma a mitad de camino entre los extremos de lo sólido y lo volátil, siendo perpetuamente susceptible de cualquier variación. De ella procede la inmensa riqueza de formas del mundo terrestre, que puede considerarse como un eco de los incesantes cambios celestes. El agua no representa para el hombre y el resto de los seres vivientes únicamente el fundamento de su vida corporal, sino que aquello que el hombre se propone como “fin” de su desarrollo espiritual, lo encontramos en las cualidades del agua prefigurado como un gran símbolo. Nos encontramos efectivamente, en sus propiedades, la misma imagen de las metas o fines que el hombre persigue con su esfuerzo interior, a saber, en el pensar la renuncia a toda forma fija, a todo prejuicio, a toda actitud intolerante contra aquel que disiente de nosotros, la actitud de comprender a los que nos rodean partiendo de su propia naturaleza o esencia y a unir a todos los opuestos en una unidad superior. De esta manera alcanza el hombre el autentico “olvido de si” en el contexto de una vida anímica pura, sana y lúcida. Si el agua le ayuda en su entrada en el mundo terrestre, trasmitiéndole las fuerzas celestes, ella puede también conducirle a un renacimiento de su esencia espiritual. WOLFRAM VON ESCHENBACH hizo alusión a esto cuando dedicó al agua los versos siguientes: “El se hizo bautizar en agua, a la que Adán su rostro debe. Del agua procede la savia de los árboles. El agua fecundante da la fuerza a toda la criatura de este mundo, pues ella clarifica los ojos, y vuelve las almas tan brillantes, que ningún ángel puede igualar. PARSIFAL XVI 817 THEODOR SCHWENK “EL CAOS SENSIBLE “ Realmente es difícil poder contar tantas cosas sobre el agua, si no es a través de un concienzudo trabajo de observación, o dejando que el agua sea la que nos observe. Cuando se testa la vibración del agua antes de haberla cargado, de una u otra manera, con una o con otra técnica, obtenemos una vibración, la que sea. Si luego la testamos después de haber sido cargada, la vibración habrá cambiado. Algo parecido pasa con la homeopatía, diluimos una sustancia en cien veces su cantidad de agua una vez. Volvemos a diluirlo en cien veces su cantidad de agua, y nuevamente la diluimos en cien veces su cantidad de agua. Si tratamos de analizar la sustancia que teníamos con los más poderosos y modernos métodos de análisis no la encontramos en el líquido de la última dilución. Sin embargo tanto su campo vibratorio, como sus efectos sobre la salud de la persona que la tome estarán ahí, eso sí, sin efectos secundarios. Hemos visto a través de libros, artículos, revistas, páginas Web, etc. varias formas de influir en el agua; también se han presentado fotografías en las que se quedaba registrada con una determinada forma la información “que se había pasado al agua”. De una u otra manera se establecen indicios, aunque los métodos no se consideren científicos, de que al agua se la puede pasar información, con formas de energías sutiles determinadas, campos vibratorios, etc. Han sido registrados casos de sanadores, curanderos, chamanes, en fin, el nombre que queramos darles, que en sus tratamientos o formas de ayudar, solamente utilizaban el agua. Personalmente conocí un caso, en que lo que se les daba a las personas era agua con unos papelitos que contenían una oración, este agua había que tomárselo según se quisiera, eso sí, antes de que se acabase del todo había que añadirle más agua, y una de las cosas que llamaban la atención de este agua, era, que los papelitos que se mantenían en ella durante cuarenta días, el tiempo prescrito para el tratamiento, se mantenían intactos durante este espacio de tiempo. Igualmente tuve el privilegio de observar como al acabarse un envase de homeopatía en el que tan solo quedaban unas gotas, se procedió a rellenarle de agua, luego se le puso durante un determinado tiempo encima de una forma de geometría sagrada y posteriormente se utilizó con los mismos efectos que antes tenía esa homeopatía. Lo hizo un médico, pero eso no cambia ni el resultado ni que se pueda comprender, tan solo es nuestro espacio de comprensión el que lo puede o no comprender. Creo que poder cambiar el espacio de comprensión influye de una forma muy positiva en la solución de la mayor parte de las desarmonías energéticas, tanto en personas como en casas, negocios etc.…